Lucentum Alicante 56-62 Marín Ence PeixeGalego | Marín asalta la pista del intratable líder

El Marín visitaba la pista del sólido líder alicantino que buscaba ante los pontevedreses la decimoséptima victoria consecutiva. La poca efectividad local, una defensa sensacional de Marín y el dominio del rebote de los gallegos le dieron la victoria al equipo de Javi Llorente.

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Ficha técnica
Lucentum Alicante HLA: Sidibe (4), Justin Pitts (2), Ortega (5), Garrido (6), Nacho Díaz (8), Donde (10), Larsson (3), Schmidt (9), Toledo (6) y Galán (3).
Marín Ence Peixe Galego: Taiwo  Badmus (16), Jordan Gregori (15), González, Vashil Fernández (8), Pantin (4), Orellano (5), Romero (13) y Sevillano (3).
Parciales: 9-16, 30-30  -descanso- 44-52 y 56-62
Árbitros: López Herrada y Más Cagide. Excluyeron por los visitantes a Vashil Fernández.
Incidencias: Pedro Ferrandiz. Unos 3.000 espectadores.

Alicante, 29 de Marzo de 2019 – David Sánchez.- El conjunto local, siempre capaz de ir de menos a más se vio en los primeros parciales del encuentro sobrepasado por un Marín mucho más incisivo en ataque y con una férrea defensa que por completo ahogaba a los de Pedro Rivero. El técnico local, en vista de que a falta de 2.40, Marín vencía 7-13 buscó con el primer tiempo muerto frenar a unos gallegos que al final del primer cuarto vencían siete arriba (9-16).

En el segundo cuarto la obligación local de ir entrando en el encuentro hizo que los locales entonasen su porcentaje de acierto a la vez que a Marín se le atascaba el lanzamiento sobre el aro local. Con rentas mínimas empezaba a vivir un Marín que vería como sobre la bocina, Lucentum le equilibraba el duelo (30-30).
La reanudación empezaba con un triple local de Nacho Díaz que daba las primeras rentas a Lucentum, pero Marín se puso las pilas con un descomunal Jordan Gregori en la dirección de juego que asombró a propios y extraños. Junto a ello, los 16 puntos de Badmus hicieron que un parcial de 22 puntos en el tercer cuarto encarrilase la victoria de Marín (44-52).
La ansiedad local de revertir el marcador le llevaba a Lucentum a ahogarse en un dantesco porcentaje de tiro de campo, obligado desde la línea de tres donde nada entraba. Marín apuntilló en el último cuarto al líder al que, tras 16 victorias, hacia hincar la rodilla.