El nuevo jugador de la plantilla naranja, de 23 años y 2.02 metros, disputó los últimos meses con el Melilla tras haber estado en el Legia Varsovia, al que se fue después de haber pasado por clubes de la ACB como Unicaja, Manresa y Breogán.
El equipo gallego destaca su «gran capacidad atlética» y le considera «un jugador muy completo y versátil, con muchísima facilidad para jugar por encima del aro».
«Defensivamente puede cubrir muchos espacios y posiciones en el campo, que, sumado a su alta capacidad física, le convierte en un gran defensor de equipo», asegura el Básquet Coruña.