El Celta vence y convence, incluso con diez (1-0)

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No tuvo suerte el Celta ante el Espanyol. Jugó, creó y marcó para ganar de manera cómoda, pero sufrió la expulsión de Pablo Hernández en el comienzo de la segunda mitad y poco antes la anulación de un gol legal de Bongoxda además de dos remates a la madera.  

  • Iago Aspas, con  un golazo, adelantó a los célticos, que sufrieron solo al final y sumaron tres valiosos y meritorios puntos. El esfuerzo fue titánico y el premio más que merecido

 

RC Celta: Sergio, Hugo Mallo, Cabral, Planas, Augusto, pablo Hernández, Bongonda (Borja Fernández, min.70), Orellana, Nolito (Pape Cheikh, min.86) y Iago Aspas (Guidetti, min.80)

RCD Espanyol: Pau López. Víctor Sánchez (Asensio, min.68), V. Álvarez (Burgui, min.53), Gerard, Pape Diop, Javi López, Hernán Pérez, Fuentes, Caicedo (Mamadou, min.48), Álvaro y Raíllo

Goles:

1-0, min.42: Iago Aspas

Árbitro: Fernández Borbalán, del comité andaluz. Expulsó con doble amarilla a Pablo Hernández, min,47) Amonestó a Hernán Pérez, Víctor Sánchez, Pablo Hernández, Augusto, Orellana

Campo: Balaídos, 17.464 espectadores

 

El Celta arrancó el choque como solía, con ritmo, una presión feroz y un enorme afán por mantener la posesión. Fue, durante muchos minutos, un monólogo, aunque las ocasiones escaseaban. Pasada la media hora de juego, con un solo equipo en el césped, el Espanyol comenzó a asomar y a generar peligro. El cuadro local había bajado algo su nivel, inevitable, y los pericos intentaron sorprender. Se abrió en el tramo final un poco el choque, con más espacios, y los vigueses dispusieron de buenas ocasiones para marcar. Y a los 42 minutos, genialidad de Iago Aspas. Recibió el cuero en  tres campos de campo, condujo, se libró con un gran regate de su marcador y colocó el cuero con calidad infinita por encima del portero. Golazo. En el último minuto, marcó Bogonda en posición correcta, pero su tanto fue anulado de manera incomprensible. Era la sentencia.

 

Tras la reanudación, duro varapalo. Pablo Hernández vio la segunda amarilla y fue expulsado cuando iban 2 minutos de juego. Dos saltos de cabeza limpios, dos amarillas. Iago Aspas reventó el larguero poco después. Al Celta se le torcía un partido que podía ir ganando por dos goles, o tres, con el remate del moañés.

Los celestes aún dispusieron de más ocasiones para marcar, siguieron generando fútbol y ocasiones, desarbolando a un Espanyol incapaz de reaccionar. La madera evitó un tanto de Bongonda a los 15 minutos. El Celta, con diez, era arrollador. Hubo más polémica todavía, Hernán Pérez, que estaba amonestado, le clavo los tacos a Sergio de manera temeraria. Ni hubo sanción. Lyuego, en el tramon final, Sergio salvó a su equipo en un saque de esquina y Nolito tuvo que ser sustituido por lesión. Pape debutó en el Celta, que se llevó una valiosa y merecida victoria.

 Foto: La Liga