Esta sucesión de errores comenzó con el fichaje de un técnico que no conocía LaLiga. Antonio “El Turco» Mohamed quiso cambiar la estrategia consolidada desde los tiempos de Luis Enrique, el 4-3-3, a otra forma de colocación totalmente novedosa, el 5-3-2. Como bien sabemos, este nuevo planteamiento sobre el terreno de juego fracasó estrepitosamente, llegando incluso a que el capitán, Hugo Mallo, afirmase que no tenían mucha idea de a qué estaban jugaban. Entre la confusión y los malos resultados, se consagró lo inevitable: el técnico argentino fue cesado.
Tras su marcha llegó Cardoso, un técnico semejante a Mohamed en lo que a falta de conocimientos de la competición doméstica se refiere. Pese a que la incorporación del entrenador portugués no fue vista con buenos ojos, Cardoso ha conseguido modificar esta percepción con la sorprendente victoria ante el Sevilla y con la derrota ante el Getafe, y es que, a pesar de haber caído, las sensaciones sobre el campo fueron mucho mejores. Es más, podríamos afirmar sin miedo a equivocarnos que el culpable de este resultado fue el cuadro arbitral.
Más allá de los técnicos y de la planificación de Miñambres, el gran problema del Celta ha sido, y continúa siendo, una defensa que no consigue ser todo lo solvente que debiera. Los números hablan por sí solos: el conjunto celeste ha encajado un total de 43 goles en lo que va de temporada. La otra cara de la moneda es el ataque, en donde los de Cardoso pueden presumir de contar con 36 tantos a su favor. En este sentido, cabe destacar al uruguayo Maxi Gómez, que lleva un total de 10 goles en los 24 partidos que el conjunto celeste ha disputado hasta la fecha. No obstante, el príncipe de las bateas continúa siendo el moañés Iago Aspas, que apunta maneras para convertirse en el máximo goleador de la competición, empatado en la sexta posición de esta clasificación con futbolistas como Charles del Eibar o Karim Benzema del Real Madrid.
Precisamente por la magia y por la capacidad goleadora y luchadora que tiene Aspas, la afición afronta con esperanza las próximas jornadas, que por otra parte no parecen nada sencillas. El Celta medirá sus fuerzas contra el Alavés, el Eibar o el Betis en sus próximos choques; todos ellos se posicionan en la parte alta de la tabla.
El conjunto celeste se enfrentará al “euro” Alavés en la jornada número 25 de LaLiga. Lo hará en el Estadio de Mendizorroza y todo apunta a que será muy complejo llevarse los tres puntos a casa. El Eibar también será un hueso duro de roer, aunque el equipo armero es de los más irregulares, algo que también le ocurre al Betis, que parece no tener una estabilidad, pudiendo permitir alguna oportunidad para el equipo celeste.
Sin duda parece difícil que el Celta recupere o consiga encaminar sus resultados para ir ascendiendo poco a poco en la tabla, pero los celtistas mantienen su fe en Iago Aspas, líder de las estadísticas.